CLAROSCURO
El cierre de atleta Alejandro de Anda
“Una nación que intente prosperar a base de impuestos, es como un hombre con los pies en un cubo tratando de levantarse tirando del asa” Winston Churchill.
LO CLARO: El mayor fenómeno social que identifica a la humanidad, es su expresión manifestada en las bellas artes.
Los griegos les dividieron en arquitectura, danza, escultura, música, pintura y literatura.
La danza es quizá junto a la pintura, el más antiguo de estos; donde su interpretativa le suponía como una entonación mística que conjugaba acciones como la invocación a la guerra o bien, como rituales relacionados con la fecundidad.
Los movimientos corporales, acompañados de la vestimenta, expresan sentimientos y transmiten emociones.
Las danzas folklóricas es la riqueza histórica de una geografía específica y representan el fruto de su cultura. El flamenco, el tango, la danza árabe son distintivos de cada nación.
El ballet folklórico de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, tuvo la distinción de participar en los festivales Internacionales organizados por Durango y Zacatecas donde hicieron gala los anfitriones, junto a países invitados como Chile, Perú, Colombia, Honduras, Islas Canarias.
En esta exposición sublime del arte dancístico, la redova, la polka, el chotis y los huapangos dieron cuenta de una de las regiones (la noreste del país) de gran influencia cultural para compartir con el mundo.
LO OSCURO: Ahora, lo no tan bueno.
La contribución al gasto público, es una obligación que emana de la misma ciudadanía al establecer un gobierno que controla y distribuye los beneficios de vivir en sociedad. Una de estas proclamas -la mayor- es el impuesto sobre la renta ISR.
Existe prácticamente en todos los países. En México no se observaba su recaudación de manera ordenada. Su implementación resulta de la diferencia entre los ingresos obtenidos –por cualquier persona o empresa- y las deducciones autorizadas.
Es decir. Usted percibe un ingreso por rentar su auto (uber), al resultante le podrá descontar los gastos que autoriza el SAT (combustibles, refacciones, etc) y al resultado o ganancia, deberá aplicar una tasa tributaria fijada por Hacienda. Más o menos así.
En otros países se llama impuestos a las empresas o impuestos sobre los beneficios, según la personalidad.
En Estados Unidos existe desde 1891 (IRS) y en nuestro país se implementó por primera vez el 20 de julio de 1921 (Impuesto del Centenario).
Hasta aquí, todo bien.
El presidente EPN señaló recientemente que su ejercicio presidencial (sic) “Al igual que una contienda deportiva, vamos a trabajar arduamente para consolidar el trabajo que hemos hecho. Habrá un cierre muy positivo”.
A lo que las diferentes cámaras empresariales del país, como COPARMEX y CONCANACO han realizados exhortos a la autoridad hacendaria en el sentido de sensibilizar el sistema recaudatorio, en aras de impulsar la competitividad como nación.
Donde –señalan los dirigentes de negocios- la OCDE (organismo para el desarrollo económico) determina como una variable general un pago estimado similar en los países miembros, de una tasa de ISR del 24.6% comparado con el 30% que paga cada mexicano.
Resta posibilidades de ser atractor de inversiones y de estar en posibilidades reales de competencia sectorial con otros países.
Sin demeritar los esfuerzos contributivos, el mejorar las tasas impositivas serían alicientes al verdadero crecimiento interno.
Al ministro de hacienda, José Antonio Meade, le ‘hace ruido’ la iniciativa empresarial para que el cierre de atleta que propone el mandatario le signifique menores entradas al presupuesto federal de cara al 2018.
Dice “Hay poco margen de maniobra para hacer ajustes”. Una respuesta que no agrada a los atletas empresariales.
COLOFÓN: El tesorero nacional, aspira a suceder en el encargo de la primera silla del país. Quizá en algo les podrá dar gusto a los sectores empresariales con respecto al cierre. Aunque sea empezar por el pie de atleta. Algo es algo.
@deandaalejandro
alejandrodeanda 